El cuerpo rocoso 2019 MO entró en la atmósfera terrestre el pasado sábado y se desintegró al sur de Puerto Rico.
Astrónomos en Hawái detectaron el asteroide 2019 MO, de un diámetro de casi 4 metros, unas horas antes de que entrara en la atmósfera terrestre y se desintegrara el 22 de junio, unos 380 kilómetros al sur de San Juan (Puerto Rico), informa el portal Live Science.
El medio indica que se trata de la cuarta vez en la historia en que astrónomos descubren un asteroide a tan poco del impacto. Las veces anteriores ocurrieron con los asteroides 2008 TC3, 2014 AA y 2018 LA, todos durante los últimos 11 años.
Según precisó la Universidad de Hawái en un comunicado, por primera vez sus astrónomos demostraron que los telescopios UH ATLAS y Pan-STARRS "pueden proporcionar una advertencia suficiente para alejar a las personas del sitio del impacto de un asteroide entrante".
La entidad detalló que el objeto ―del tamaño de un automóvil, aunque no se considera grande para un asteroide― fue observado cuatro veces en un período de 30 minutos en las instalaciones de ATLAS en Mauna Loa, en la isla de Hawái, alrededor de la medianoche del pasado sábado. En ese punto, el objeto estaba a solo 500.000 km de la Tierra.
El 2019 MO no causó daños, ya que no logró alcanzar la Tierra. Aun así, produjo un gran destello en el cielo, mientras que, según estimaciones de los científicos, la energía de su impacto debió oscilar entre 3 y 5 kilotoneladas de TNT. Los especialistas calculan que viajaba a una velocidad de 14,9 kilómetros por segundo.